Cuando la lluvia es escasa, se elevan las temperaturas, y encima quizá no estaremos algunos días en casa (probablemente por las vacaciones) y es el momento de pensar en soluciones prácticas y acciones concretas para optimizar el uso de agua a nivel doméstico.
Veamos qué se puede hacer…
Agrupa plantas
Por supuesto me refiero a aquellas que están en macetas o contenedores. Pon las plantas con necesidades de agua similares juntas; será más cómodo para ti al regar manualmente, facilita la vida a los vecinos que regarán en tu ausencia si les pides ayuda y la opción de algún tipo de riego automático será igualmente racionalizado para todos los ejemplares, tanto en volumen de agua como en tiempo de riego.
Cuida especialmente las verduras, el césped y las rosas
Si tienes verduras en tu huerta doméstica, ten presente que son por lo general son de bastante alto mantenimiento, cuando se trata de agua ya que la necesitan mucho y la necesitan a menudo. Las hierbas Tomillo, romero etc) suelen ser bastante tolerantes a la sequía, pero no es así en el caso del césped (que siempre tiene “sed”) y de la mayoría de los arbustos de flores, muy especialmente las rosas.
Atención a las plantas en maceta
El motivo es muy sencillo: necesitan más agua (no habla de cantidad sino de que en general requieren riego frecuente) porque no hay mucha tierra en la que almacenar la humedad. Una solución interesante es añadir polímeros de retención de agua en el suelo. Puedes asesorarte y adquirir este producto en tu tienda favorita o en tu centro de jardinería local. Todo lo que necesitas es una cucharadita o dos de polímeros para un contenedor de tamaño mediano.