La verdad es que no se me ha ocurrido un título mejor para esta iniciativa que ya ha sido inaugurada desde hace un par de años. Comencemos por su nombre correcto: estamos hablando del Svalbard Global Seed Vault.
Traducido al español podría ser Bóveda Global de Semillas de Svalbard. La idea es muy buena y lo que es mejor: muy bien intencionada. Se pretende preservar la mayor diversidad posible de especies vegetales protegiéndolas en un ámbito seguro y – por decirlo de algún modo- invulnerable al cambio climático.
Los desastres naturales están a la orden del día, incendios e inundaciones son las que más ponen en peligro la supervivencia de especies de plantas y cultivos. No solo estamos hablando de especies ornamentales, hablamos de una especie de “seguro” que garantice que ante cualquier catástrofe o cataclismo de dimensiones importantes, las generaciones sobrevivientes tendrán como sembrar nuevamente y alimentarse, tal como las más antiguas civilizaciones del planeta.
¿Cuánto se almacenará? Alrededor de tres millones de semillas están a salvo en esas instalaciones e incluso algunas de ellas se protegen ya sembradas como especies vivas y mantenidas en microclima especial.
Como puedes ver en la imagen, se trata de una bóveda de grandes dimensiones, construida en el archipiélago de Svalbard unos 1000 km al norte de Noruega. ¿Por qué allí? Es una buena pregunta que tiene una respuesta bastante lógica que ya hemos mencionado antes: se cree un lugar relativamente protegido de los eventuales cambios climáticos.