Sabores en el jardín. El tema va más allá de la simple moda; se trata de tener los alimentos más frescos, más saludables y más cerca. ¿Cuáles son? Aquellos que cultivamos en nuestra propia casa. Créeme que no requiere gran sabiduría y que la experiencia te enseña técnicas y corrección de errores.
En nuestro jardín podemos tener sabores típicos o clásicos y otros menos comunes y algo exóticos… ¡pero muy bienvenidos! Vamos por partes…
Algunos afirman que es hora de poner fin a la “tiranía” de perejil, el tomillo, el romero y la menta en la cocina (definidos como “los clásicos”) y mirar más allá de las hierbas de siempre para añadir fuerza y un toque personal a nuestra cocina.
Algunos de nosotros tenemos una especie de relación peculiar con las hierbas aromáticas. Estamos apegados a nuestros favoritos – perejil, romero, tomillo, albahaca, menta – sin embargo, no siempre nos atrevemos alejarnos de esos pocos elegidos y aventurarnos a conocer más posibilidades.
Lo cierto es que hay muchas otras hierbas y puedes sentir que la elección puede ser confusa. Pero aquí vendré en tu auxilio. Una vez más, si me concedes tu confianza, estaré en condiciones de aportar desde mi propia experiencia personal ya que hoy, cuando pensé abordar esta propuesta, entendí que nada sería más provechoso que relatar mis propias conclusiones.
Así las cosas… mi propósito es ayudarte; he dejado planteado el tema y te invito a estar pendiente porque dedicaré el próximo post a proponerte alguno de esos “nuevos sabores”. ¿Te animas?