Precisamente ahora en otoño, es momento de hacer dos tareas importantísimas para garantizar una plantación exitosa la próxima temporada: recolectar las semillas y conservar las semillas. En cuanto al primer punto, te invito a consultar un post anterior que compartimos hace pocos días; hoy nos dedicamos de lleno a los…
Métodos de conservación de semillas
Los dos métodos principales de secado de semillas son el llamado proceso húmedo, que se utiliza para las plantas que producen las semillas de frutas u otro medio húmedo, y el procesamiento en seco, que se utiliza para las plantas que producen semillas secas, como las que producen vainas.
Procesamiento húmedo
* Raspa las semillas de la fruta y enjuaga para retirar restos.
* Ponlos en una bandeja o un cubo lleno de agua, deja remojar unos minutos para remover la capa superior, ya que a menudo es no viable.
* Vierta el agua a través de un colador para recoger la semilla.
* Coloca las semillas limpias en una bandeja o un trozo de tela que permita que se sequen a la luz solar directa.
Procesamiento en seco
* Recoge las semillas y ponlas a secar en una bandeja o un pedazo de tela.
* Cuando las semillas estén completamente secas, quiere decir que están listas para su almacenamiento. Debes eliminar cualquier resto de suciedad cepillando suavemente o tocando con los dedos o tamizado a través de un colador fino.
Guárdalas en sobres de papel etiquetados con el tipo de semillas que almacenan y la fecha.