No hay planta, por muy robusta que sea, que no necesite unos mínimos cuidados y atención. Si hemos elegido las plantas siguiendo las indicaciones sobre espacio y proyecto anteriormente vistos, orientación, clima y estilo, sol, sombra ,terreno ,viento tierra y contenedores, el mantenimiento y los cuidados se reducirán al mínimo imprescindible.
Entre la primavera y el otoño, daremos riego regular tanto mejor si es automático. También abono periódico, desinfección, cava del terreno, para romper la corteza superficial y extraer las malas hierbas. Hay que hacer limpieza de las plantas, por ejemplo retirar las partes secas es una de las intervenciones que tendrán que realizarse en cualquier terraza o balcón.
Durante los meses de invierno, los cuidados se reducen a un riego en largos intervalos. Desgraciadamente, las plantas pueden verse dañadas también por las inclemencias naturales, como temporales, rachas de viento, escarchas, heladas, granizo etc., factores contra los que no podemos hacer gran cosa.
En los balcones y terrazas tomaremos algunas precauciones, por ejemplo: colocar redes antigranizo en macetas y jardineras. A pesar de todo, a menudo las plantas sufren daños. Además las enfermedades por hongos y los parásitos suelen atacar a las especies mas debilitadas. Por ello hay que examinarlas periódicamente para poder eliminar cualquier problema.