¿No cuentas con suficientes espacio en el frente o los alrededores para crear un jardín? Plántalo en tu techo, y disfruta de los beneficios de uno de los últimos hitos en la arquitectura de bajo impacto ambiental.
1. Es sencillo de implementar. Los únicos cambios en tu techo son una cobertura repelente a la humedad y las raíces, y un sencillo sistema de drenaje. Una tela metálica dará el sustento necesario a la tierra, y ya están disponibles en el mercado terrarios diseñados para ubicarse en el techo.
2. Sólo necesitas especies cómunes. Hierba y liquen harán una cobertura verde fresca y abrigadora según la estación.
3. La inversión se amortiza en el verano. Puede parecer costoso en su siembra y mantenimiento, pero un techo ajardinado conserva mejor la frescura en el interior de la casa, y significa un ahorro del 25% en sistemas de aire acondicionado y energía.
4. Más silencio. El jardín en el techo es una envidiable barrera contra el ruido urbano.
5. Menos drenaje. El techo ajardinado prácticamente elimina la necesidad de canaletas y otros sistemas de drenaje para la época de lluvias.
Y está, claro, el increíble y cálido aspecto que adquiere la casa, sumándose al paisaje en un todo armónico.