Esta singular flor es ampliamente difundida en el mundo budista, siendo uno de los símbolos más antiguos, según dicen, brotaba de los pies del primer buda, Sidarta Gautama. Es por eso que le sirve como trono o asiento, indicando un nacimiento divino.
Científicamente, esta flor es llamada Nelumbo nucifera, de la familia de las Nelumbonáceas. Como es de suponerse, su origen lo tiene en Asia, en clima tropical.
La flor de Loto es una planta acuática, con grandes flores color rosa, el cual varía un poco el tono al madurar, y sus hojas, particularmente grandes, reduce la aparición de algas a la vez que provee de sombra a los peces. Entre sus necesidades está ser expuesta directamente al sol, y siendo acuática, necesita al menos 60 cm de profundidad de agua. Aunque, es conveniente retirarla del agua durante la época fría, cubriendo y protegiendo su fondo.
Sin duda, esta bella flor aportará colorido a los estanques de cualquier jardín, así como un toque de misticismo y serenidad…
Fuente: La Flor Infojardín | Imagen: Flickr