Jardinería en macetas: es un hecho que no convence a todos ya que hay muchas personas que no gustan de la jardinería si ésta no se desarrolla en tierra plena. No obstante, en otoño e invierno, elegir trabajar en macetas o contenedores es una muy buena idea en mi opinión. No es necesario realizar un curso para aprender; por ello entendí interesante enumerar para ti (a lo largo de dos post) las 10 razones por las que recomiendo practicar la jardinería en macetas.
- Es fácil:Optar por este tipo de jardinería es un gran idea para comenzar. Incluso un principiante puede crear un jardín de macetas espectacular en muy poco tiempo. Todo lo que necesitas para empezar es una maceta, un poco de tierra para macetas y semillas o plantas.
- Es económico: Se puede usar casi cualquier cosa para “improvisar” una maceta o contenedor; incluso un viejo cubo encontrado en una venta de garaje, con algunos agujeros perforados en el fondo. Basta con mirar alrededor de tu casa y te sorprenderás cómo muchas cosas son aptas.
- Ocupa poco espacio: hasta el espacio más pequeño puede ser mejorado por un jardín de macetas. Cualquiera sea la medida de tus limitaciones de espacio seguro puedes diseñar un jardín próspero y bonito.
- Puede hacerse en cualquier latitud y clima. Aún si vives en Alaska, la jardinería en macetas te libera de la geografía.
- Ideal para trabajar con niños: los peques quedan fascinados, se divierten, la familia fortalece vínculos y todos aprenden. ¡Todas son ventajas te lo aseguro!
Te invito a estar pendiente de la segunda parte de esta propuesta.