La Hoya carnosa es de esas trepadoras que nos encanta tener. En general la elegimos al principio por la belleza sin igual de su flor (mejor dicho de su racimo floral) y poco después nos damos cuenta que es una trepadora que buscara asirse y expandirse por donde le demos oportunidad.
La habrás reconocido por la imagen de portada, y creo que vale la pena citar algunos de los muchos nombres comunes por las que se la conoce a lo largo y ancho del planeta: flor de cera, flor de nácar,flor de porcelana, flor de cerámica entre otros. Es más, te invitamos a que sumes a través de tus comentarios, otros nombres comunes con que se la conozca en tu región o país.
Pero para asegurarnos de no cometer errores, citemos su nombre científico: estamos hablando de la Hoya carnosa, perteneciente a la familia Asclepidaceae.
Destaca por sus hojas grandes, verdes y brillantes y por supuesto por su flor aromática y bellísima.
Se reproduce por esqueje o acodo para lo que recomiendo seleccionar ramas jóvenes con cuatro nudos por lo menos. Si la colocas en un sustrato adecuado (turba y arena por ejemplo) enriquecido con hormonas de enraizar y quitas algunas hojas de la base, pronto echará raíces.
Crecerá mejor con más horas de sombra que de sol y si está resguardada del viento.