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- Elige una planta que tenga no menos de entre 25 a 30 cm en maceta por cada 9 metros cuadrados de suelo o superficie en tu casa u oficina. Esa proporción te asegurará una purificación de aire más eficaz.
- No te quedes con una sola fuente de información. Te sugiero haga una o dos referencias cruzadas de varias guías de información y cuidados para comprobar si la información es precisa y la planta que eliges sobrevivirá en el ambiente destino y con los cuidados que podrías darle.
- Dado que los nombres comunes varían mucho no solo de país en país, sino incluso entre zonas de un mismo país, asegúrate de conocer y cotejar el nombre botánico o científico de todas las plantas que estén en tu “foco” de atención, de modo que no haya errores al comprar.
Cuidados
- Insisto en tener en cuenta que dónde vas a colocar las plantas y la cantidad de sol que van a recibir para que su planta se desarrolle en esa área.
- Organízate documentando el agua necesaria y agendando en calendario el ritmo de cada una para mantener los programas de riego equilibrado.
- Quita el polvo periódicamente las hojas de cada planta con un paño húmedo para asegurar la correcta absorción de partículas de aire y toxinas.
- Mantén su suelo fertilizado evitando fertilizantes no orgánicos o sintéticos.
- Siempre que sea posible, riega con agua de lluvia. Todos los tipos de plantas de interior crecen mejor con las fuentes naturales de agua.